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La cámara estenopeica es a la vez el origen y el milagro de la fotografía.
Algo tan sencillo como una caja, bien
sellada para que no permita el paso de la luz hacia su interior,
excepto por un único agujero (el estenopo), y en lado opuesto al
agujero el material sensible (el papel o la película fotográfica).
Y ya está, ¡esa es toda la tecnología
que hace falta para hacer fotografía!
¿Y el obturador?, pues un cartoncito
que pongas delante del susodicho estenopo cuando quieras dar por
concluida la exposición.
La cámara estenopeica (pinhole) es sin
duda la primera cámara fotográfica que en ocasiones de manera
natural y en otras dándole vueltas al invento se le ocurrió a la
humanidad, carente de óptica pero llena de posibilidades creativas (
y sorprendentemente baratas) para aquel que le apetezca experimentar.
Suele ser el primer ejercicio práctico
de muchos cursos de fotografía, y como demuestran estos trabajos que
os muestro también lo fue para mi propio curso el año que cursé mi
primera asignatura de foto en bellas artes.
HISTORIA DE LA CÁMARA ESTENOPEICA
Seguramente al humano antiguo, como a
cualquier contemporáneo, le producían curiosidad los juegos de
luces y sombras
.
.
Imagínate a los chamanes cavernícolas
en las entrañas de una cueva oscura iluminadose solamente mediante
antorchas y lamparitas de sebo, ¡la de cosas increíbles que deben
de haber visto en semejante situación!, pero al humano también le
puede llamar la atención la luz que se filtra a través de una tela,
de un orificio en una pared, de las hojas de los árboles y por qué
no, también la luz que entra a través de un pozo o de la boca de
una cueva.
Ya Aristóteles (S.IV aC) escribía
"¿Por qué cuando la luz atraviesa un orificio cuadrado, o por
ejemplo a través de un trabajo de cestería, no forma imágenes
cuadradas sino circulares? “, pero claro los griegos de la época
estaban convencidos de que los ojos emitían rayos para ver en lugar
de recibir la luz, así que poco más allá pudo ir el pobre, y se
quedó con la duda. Quien si fue más allá, según se cuenta, fue
como casi siempre un chino, Mo Ti, otro filósofo, que cien años
antes que el griego se dio cuenta de que los objetos reflejan la luz
que reciben en todas direcciones, él sí que entendió el fenómeno.
Pero es que aún llegó más lejos afirmando que esos mismos rayos al
pasar a través de un orificio producen una imagen invertida en una
superficie, et voilá , esto
es ni más ni menos que la cámara oscura.
A ellos les
siguieron con experimentos prácticos, casi diría que de verdadera
fotografía, otro chino y un árabe, Albazen, ambos en el sX, que
aunque no consiguieron fijar las imágenes sobre ningún soporte, eso
vendría luego, sí que lograron proyectarlas en pantallas.
La edad media al
parecer no fue tan oscura, como podeis ver.
También Roger
Bacon , doscientos años más tarde, en el sXIII, hizo experimentos
parecidos con la luz.
Después, en el
renacimiento, cuando todo el mundo parecía querer experimentar con
las ciencias, las cámaras oscuras sirvieron de herramienta al
trabajo de astrónomos y pintores. Leonardo da Vinci, Paolo
Toscanelli, y por supuesto Giovanni Battista della Porta (considerado
popularmente el inventor de la cámara oscura aunque a estas alturas
empieza a parecerme que no fue exactamente el primero...), y más
adelante Kepler, y Vermeer, entre otros mucho aprovecharon las
utilidades del sencillo invento.
Fotografiar con
cámara estenopeica es para cualquier fotógrafo una experiencia
digna de vivir. Es la fotografía en su esencia, tan simple y tan
mágica que sorprende que aquello realmente funcione.
Y lo mejor es que
la haces tú mismo. Entre imagen y fotógrafo no hay una máquina
compleja y semidesconocida, llena de mecanismos que pueden fallar en
cualquier momento (¡y lo caros que son vive dios!), o peor aún que
fallar, que son cacharros que parecen diseñados para darte la
certeza de que saben más que tú, que de alguna manera el aparato
ese que tienes entre las manos es capaz de con sus miles de
combinaciones y piececitas tecnológicas, hacer cualquier foto mucho
mejor de lo que al final has sido capaz de hacerlo tú. Eres un
humanito limitado, y la máquina... ¡la máquina esa es pero que muy
lista!.
La cámara
estenopeica tiene pocos secretos, y los que tiene los has construído
tú mismo con tus propias manos. Esa esencia, esa simplicidad es
atrayente, y además es tremendamente divertida, produce la misma
satisfacción que de niño entender que los títeres, ¡oh
revelación! los mueve un señor escondido detrás de una caja, y que
tú mismo puedes hacerlo igual que aquel señor en cuestión. Y es
que la fotografía estenopeica tiene mucho de sombra chinesca, de
realidad que no existe pero puedes verla, y de truco de magia
desvelada.
QUÉ ES
TECNICAMENTE UNA CÁMARA ESTENOPEICA
Para
las almas científicas añadiré que el funcionamiento intrínseco de
nuestro aparatito se basa en que "Cada punto del sujeto
refleja la luz que recibe en forma de un haz que se extiende en todas
direcciones, como decíamos antes. Lo que hace esta cámara es
seleccionar un único rayo de ese haz, de forma que todos los demás
son rechazados y sólo uno llega a la superficie sensible, formando
un punto de la imagen".
VENTAJAS
DE UNA CÁMARA ESTENOPEICA FRENTE A UNA CÁMARA CON LENTES
Además de todo lo
que hemos referido anteriormente. Hay un par de fenómenos
fenomenalmente sorprendentes más: son las ventajas técnicas que
tiene una cámara estenopeica frente a una con lentes (una normal,
vamos). Porque increíblemente es que las tiene.
La profundidad de
campo de la estenopeica es infinita. Su distancia mínima de enfoque
es nada, cero, todo aquel elemento que entre en el campo de visión
se reproducirá nítidamente en nuestra fotografía.
Además no tienen
error de paralaje.
Cosas veredes...
QUIERO HACER MI
PROPIA CÁMARA ESTENOPEICA
y para los que
seais más de experimentar, os puedo indicar algunos detalles a tener
en cuenta a la hora de construirse una camarita propia.
Escoje una caja de
un tamaño aproximado al que quieras que tenga tu foto (la luz que
entra por el estenopo refleja en todas las paredes, así que si la
caja es muy grande perderás nitidez, por esta misma razón mejor si
la forras o la pintas de negro toda por dentro).
Séllala
completamente (yo lo hice con cinta aislante, va fenomenal, hasta que
bueno, le aplicas el calor de los focos y se empieza a derretir...)
El tema de
practicar el agujero del estenopo es la parte más compleja,
ciertamente. Cuanto más pequeño y más regular sea mejor (para
intentar evitar la difracción), pero como todo es relativo, los más
pros podeis encontrar en internet tablas de equivalencia entre
longitudes focales y diámetros del estenopo. Si no quieres entrar en
complicaciones vamos a dejar el tamaño del estenopo en medio mm,
bueno un pequeño alfiler.
La perforación
puedes realizarla directamente sobre tu caja, si el material del que
esté hecha te lo permite, o practicar un agujero un poco mayor,
forrarlo de papel albal, y hacer el estenopo en ese papel albal.
Dependiendo de las
condiciones de iluminación que tengas habrás de calcular el tiempo
de exposición que necesitas.
Por último nos
falta el obturador. La pieza que pondrá final a la entrada de luz al
interior de nuestra máquina. Pues es tan simple como un cartón
cualquiera que tape el estenopo cuando hayas conluído la exposición
Y ahora... y si
hago más de un estenopo ¿que pasará?, ¿y si muevo la cámara
durante la exposición?, ¿ y si deformo el material sensible?.
¡Hala a
experimentar!
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